Los aparatos y equipos eléctricos y electrónicos deben estar protegidos por una envolvente contra la entrada de suciedad, polvo, agua y el contacto con partes del cuerpo u objetos, en función del lugar de uso y de las condiciones ambientales. Esto sirve para evitar peligros para las personas y para garantizar el funcionamiento del aparato, previniendo fallos causados por el agua, la corrosión o la contaminación conductiva. Además, debe evitarse el estrés mecánico, por ejemplo, por impactos, para garantizar un uso fiable.
Estas clasificaciones son similares pero no intercambiables, como tampoco lo es la severidad de los ensayos. Las normas militares son mucho más estrictas, pero algunos fabricantes comerciales pueden optar por cumplir con las normas de grado militar para destacar el nivel de protección de su producto.
El sistema de clasificación del código IP tiene dos dígitos. El primer dígito va del 0 al 6 y corresponde a la protección contra la entrada de cuerpos sólidos. El segundo dígito va del 0 al 9 y se refiere a la protección contra la entrada de líquidos. Los dos dígitos son completamente independientes entre sí.
Algunos dispositivos solo necesitan una clasificación IP para uno de los dos dígitos. Si un producto solo se somete a ensayos de líquidos y no de sólidos, puede tener una "X" en el dígito de sólidos. Por este motivo, el ensayo se denomina a veces ensayo IPX. Teniendo en cuenta estos parámetros, existen 70 combinaciones de códigos de protección.
Existe una tercera letra opcional que se refiere al uso de alta presión.
El ensayo de protección contra la entrada de objetos sólidos extraños incluye dedos y otros objetos, pero también arena y polvo. Para los objetos más grandes, las instalaciones de ensayo IP utilizan sondas calibradas para comprobar las aberturas de la carcasa.
En el ensayo de polvo IP, el artículo se coloca en una cámara sellada donde el polvo calibrado se agita y se sopla continuamente alrededor de la envolvente. Tras el ensayo, la envolvente se limpia y se abre para inspeccionar si hay polvo en su interior.
Muchos productos, como los faros de los coches, los conectores de los móviles y diversos componentes electrónicos, deben funcionar de forma fiable, especialmente cuando se utilizan en entornos húmedos o en el exterior. La resistencia a las salpicaduras de agua es, por tanto, una importante característica de calidad que se comprueba en nuestro laboratorio para evaluar la resistencia de los aparatos y componentes eléctricos. Nuestro laboratorio está diseñado para las clases de protección IP de IPX1 a IPX9k, que indican la protección contra la entrada de agua con efectos perjudiciales.
* Identificado como IPX9 en la norma IEC 60529. Todos los ensayos con la letra "K" están definidos por la norma ISO 20653
En Applus+ Laboratories, contamos con una red mundial de laboratorios capaces de prestar servicios de ensayo IP para diferentes normas y con distintas especializaciones sectoriales (iluminación, automoción, aeroespacial, militar). Podemos realizar ensayos para todas las normas pertinentes, incluida la NEMA, ya que nuestros laboratorios de ensayo IP en Estados Unidos y Canadá son laboratorios de ensayo certificados NEMA 250 con una gran experiencia en la interpretación de la norma NEMA 250.
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